La identificación y ocultación de extranjeros tras el ataque anglo-holandés de 1596*

 

The identification and concealment of foreigners following the Anglo-Dutch attack of 1596

 

 

 

Bethany Aram

(Universidad Pablo de Olavide. Sevilla)

 

 

 

Resumen: Se analiza la propuesta expulsión de extranjeros de los puertos de Castilla, así como la documentación generada en torno a la misma. La toma y saqueo de Cádiz en julio de 1596 motivó a Felipe II y al Consejo Real a ordenar la recopilación de un censo de los extranjeros en los puertos de Castilla, que proporciona datos relevantes para varios temas de interés actual en la época moderna. Tras la recopilación de datos, la corona decretó la prohibición de los extranjeros pertenecientes a “naciones enemigas” dentro de 20 leguas de los puertos del mar y de la capital, lo cual provocó protestas y peticiones de exenciones.

 

 

Palabras claves: Extranjeros, expulsiones, Felipe II.

 

 

 

 

Summary: This article analyses a proposal to expel foreigners from the ports of Castile, as well as the documentation it generated. The seizure and sacking of Cadiz in July 1596 led Philip II and the Royal Council to order data compiled on foreigners residing in the ports of Castile, thereby offering information of interest for the study of a variety of subjects in the early modern period. The King’s prohibition of foreigners within 20 leagues of the ports and the capital is considered, as are the protests and requests for exemptions that it provoked.

 

 

Key words: Foreigners, Expulsions, Philip II.


La identificación y ocultación de extranjeros tras el ataque anglo-holandés de 1596[1]

 

 

Las relaciones entre distintos grupos de extranjeros y la Monarquía Hispánica constituyen actualmente un tema historiográfico de gran dinamismo dentro de los estudios sobre la época moderna. El interés en el tema se ha plasmado y alimentado en diversos foros: entre otros, el Coloquio Internacional Los extranjeros en la España moderna celebrado en Málaga en noviembre de 2002, el número monográfico de Cuaderos de Historia Moderna. Los Extranjeros y la Nación en España y la América española publicado en 2011, y el Congreso Internacional El Greco y los Otros. La contribución de los extranjeros a la monarquía hispánica, celebrado en Yecla en 2014.[2] Han proliferado estudios de distintas comunidades “nacionales”[3] y situaciones locales,[4] a la par de avances metodológicos en torno a los mecanismos de exclusión y pertenencia, como son las obligaciones fiscales[5] y las cuestiones de naturaleza y vecindad.[6] Mientras que los extranjeros ricos y pudientes suelen ser los mejor documentados, la historiografía no deja de interesarse por los emigrantes más humildes que pueden aparecer en algunos procesos o registros hospitalarios o parroquiales, y incluso censos, aunque pocas veces conservados para el Siglo XVI.[7]

 

En ese panorama historiográfico el presente artículo introduce un expediente del Consejo de Castilla con documentación recogida sobre la población extranjera en los puertos del reino de Castilla a finales del Siglo XVI, descubierto por Geoffrey Parker en la recientemente identificada sección Altamira de la Hispanic Society of America (New York).[8] El hallazgo fue revisado inicialmente por Geoffrey Parker, Rachel Ball y Bethany Aram en colaboración con el personal del Hispanic Society of America, liderado por Mitchell A. Codding y John O´Neill, durante el verano de 2012. Al igual que las otras partes de la Colección Altamira, los heterogéneos documentos en la Hispanic Society of America aglutinan papeles de diversas procedencias. La segunda caja revisada, provisionalmente enumerada “Caja 2”, resultó particularmente rica en material referente al reinado de Felipe II. Dentro de esa caja hallamos diez carpetas de documentos. La cuarta carpeta, en concreto, contenía 58 expedientes de diversa naturaleza en su mayoría del reinado de Felipe II, y pertenecientes originalmente a los secretarios reales Mateo Vázquez de Lecca y Jerónimo Gassol, así como los ministros Juan de Zúñiga y don Luis de Requesens. El expediente número 49, referente a la situación de la población extranjera en los puertos del reino en 1596-7, contiene cinco documentos, incluida una consulta firmada por los miembros del Consejo de Castilla con la respuesta hológrafa del rey (II-iv-49a), una copia de la información remitida por distintos corregidores de la mano del secretario Pedro Zapata de Mármol (II-iv-49b), una petición del Regimiento de Sevilla dirigida al Rey y su Consejo (II-iv-49c), otra consulta original al Rey por parte del Consejo de Castilla (II-iv-49d), y una relación de exenciones al orden de expulsión recomendadas por el Consejo de Castilla y aprobadas por el Rey (II-iv-49e).

 

Mediante una breve contextualización y análisis de la documentación considerada, procederemos a señalar algunos de los puntos más relevantes para el panorama historiográfico actual, así como las posibles implicaciones de la coyuntura para unos 774 extranjeros registrados en las hojas consideradas y los otros muchos, según las mejores estimaciones, que conseguían eludir el censo.[9] Al no abarcar el censo los puertos de los reinos de Aragón ni de Portugal, la mayoría de los extranjeros registrados se localizaron en cuatro de los 41 puertos mencionados, donde se sabe por otros estudios que residían muchos más: Sevilla (352), Sanlúcar de Barrameda (72), Fuenterrabía (por encima de 52) y San Sebastián (39). Mediante el estudio de la documentación producida, interesa indagar en los mecanismos que podían influir en su identificación y ocultación.

 

El contexto de las medidas barajadas en 1597 la guerra anglo-española, el auge del Protestantismo, la revuelta de los Países Bajos, las guerras de religión, y los repetidos embargos de bienes de los mercaderes que se podían sospechar de comerciar con el enemigo genera una situación de inseguridad para los extranjeros en los puertos y, muy especialmente, para los que se podían asociar con las “naciones enemigas” (es decir, Inglaterra o Francia) o con territorios de los Países Bajos rebelados contra la Monarquía Hispánica. En esta coyuntura, la recogida de datos sobre la población extranjera de los distintos puertos y de su fiabilidad formó parte de la respuesta oficial a la toma y saqueo de Cádiz liderado por el conde de Essex, Robert Devereux, a finales de junio de 1596.[10] No obstante el asedio anglo-holandés y el miedo oficial que podía fomentar, sin duda agravada por los ataques coetáneos a San Juan de Puerto Rico, los datos recogidos apuntan hacía el arraigo de gran parte de la población foránea peninsular. Es más, se detecta un intento por parte de las autoridades locales y, finalmente, de la corona, de facilitar la permanencia de varios extranjeros en los puertos. En este sentido, podría ser que algunos extranjeros pudientes y adinerados fuesen capaces de eludir el registro. La documentación recogida, por otra parte, hace referencia a algunos de los miembros más pobres de las comunidades foráneas que raramente aparecen en otros tipos de documentación.

 

Tras la recogida de datos y sin referencia a los mismos, el Consejo de Estado decretó la prohibición de las personas que pertenecían a las “naciones enemigas” u originarios de “territorios rebeldes” dentro de 20 leguas de los puertos del mar y de la capital el 16 de abril de 1597.[11] Las sospechas de las autoridades se dirigían primordialmente contra los extranjeros más humildes que estimaban no merecer su “satisfacción y confianza”. Tras considerar los datos aportados sobre los posibles afectados, la coyuntura ofrece un caso de estudio para considerar el impacto de los factores bélicos, políticos, y económicos y, sobre todo, la importancia de los distintos contextos locales, en la definición, así como la interpretación y la aplicación (o el incumplimiento) de la ley.

 

Estas cuestiones se abordan mediante el estudio de cinco documentos redactados sucesivamente en respuesta al saqueo anglo-holandés de Cádiz del 21 de junio al 5 de julio de 1596: la información que los jueces y corregidores aportaron sobre los extranjeros bajo sus jurisdicciones a petición de la corona, una consulta sobre la real provisión para prohibir la residencia y estancia de los extranjeros originarios de territorios enemigos dentro de 20 leguas de los puertos del mar y de la capital (por expresa indicación del Felipe II), las protestas y peticiones de exenciones provocadas por la medida, especialmente desde Sevilla, y, finalmente, la admisión de sendas exenciones. En lugar de una edición crítica de esa documentación hasta ahora desconocida optamos por un vaciado de la misma en tablas que podrán servir a las necesidades de distintas investigaciones. Sin transcribir literalmente la documentación, se ha respetado la terminología y esquemas calificatorias empleadas en la misma.

 

El concepto de “extranjero” manejado por las justicias locales incluía principalmente a “flamencos” (276) y “franceses” (253), así como a 164 “italianos” y “genoveses” probablemente omitidos en otros casos por no considerarlos “extranjeros” del todo (como sucedió en mayor grado con los portugueses, que no se registraron, o los “aragonceses”, notados en una única ocasión), 24 “ingleses”, 15 “irlandeses”, 7 “alemanes”, 4 hombres “de levante” , 2 “griegos”, un “escocés” y otro hombre “que no se sabe si es turco o berberisco”, como se plasma en la Figura 1. Entre los “extranjeros” figuraban hombres nacidos en los puertos considerados o que poseían cartas de naturaleza.

 

Figura 1. Procedencia citada de los extranjeros registrados (con números mínimos)

 

Al considerar las categorías exploradas por Tamar Herzog, merece la pena subrayar que la mayoría de los extranjeros registrados se calificaban como “vecinos”, aunque no como “naturales” que sería lo contrario de “extranjeros”, aún cuando tuviesen cartas de naturaleza. Como vecinos, representaban a unidades familiares cuya naturaleza también se llegaba a considerar sin aclarar mediante referencias a sus esposas e hijos. Los datos registrados y otros sin registrar complican cualquier intento de abordar la cuestión de la endogamia o exogamia de estos grupos (como se plasma en la Figura 2), condicionada, evidentemente, por el tamaño de la población foránea en un puerto determinado:

 

 

Figura 2. Estado “civil” de los extranjeros registrados

 

 

 

            Ciertamente, la omisión de información sobre el estado civil de un extranjero o referente a la naturaleza de su cónyuge en muchos casos podría interpretarse como un intento de disimular la endogamia. También es verdad que las gradaciones ambiguas del concepto de “natural” complicaron aún más el asunto: los jueces mismos parecían dudar de la ¨naturaleza” de las personas nacidas en Castilla de unos o dos progenitores originarios de otros territorios. Entre otros casos, es llamativa la situación del flamenco Lorenzo Simay,[12] “capitán de su nación” en Cádiz y poseedor de una cédula de naturaleza, quien estuvo casado con una mujer “flamenca nacida en Cádiz” a principios de 1597 pero calificada, no obstante, como “natural” en la exención concedida a finales del mismo año.

 

 

Los extranjeros porteños en 1597

 

Entre los cinco documentos compilados en 1596-1597 y estudiados aquí, la “Relación de los extranjeros que ay en los lugares puertos de mar y de lo que informan las justicias cerca dellos” remitida al Rey en su Consejo Real, constituye el más largo y sustancioso. Este informe de 30 hojas se basó en una información solicitada a los corregidores y justicias de los puertos del mar sobre “los estrangeros que en cada uno dellos viven, y de su trato y manera de vivir y caudal que tienen y si son casados y tienen hijos y de su reputación”. Además que la “naturaleza” de los extranjeros, interesaba su grado de integración en la sociedad local o peligro potencial para la misma. Los datos sobre sus matrimonios, hijos, actividades económicas y bienes raíces supuestamente medían el grado de asimilación, utilidad o posible amenaza de cada extranjero para la monarquía y, de forma más práctica, para la comunidad donde residía. Las apreciaciones de los distintos jueces y oficiales, que consideraron a todos menos 154 extranjeros de su “satisfacción y confianza”, en algunos casos dejan entrever intereses locales a favor de ciertos grupos -- presentados como hispanófilos buenos y provechosos -- y en detrimento de otros, que posiblemente llegarían a impactar más en la ejecución de la provisión real que en la política oficial.

 

Más allá que las preocupaciones y perspectivas oficiales, la documentación sobre los extranjeros porteños solicitada y remitida a la corona a finales del siglo XVI indica una importante diversidad ocupacional. Entre las profesiones identificadas encontramos a 140 mercaderes, 65 hombres con negocios, 39 marineros o pilotos, 32 sirvientes, 25 sastres, 22 tenderos, 21 hosteleros (especialmente peligrosos según la justicia), 19 toneleros, 11 zapateros y otros 173 extranjeros con oficios indentificados, incluidos 10 traductores de la Inquisición, 2 regidores, y 3 “cónsules de sus naciones”. Así la Figura 3 subraya una gran diversidad entre los oficios mencionados. Aunque la ocupación más común era la de mercader, sale a relucir la diversidad de las profesiones identificadas entre los extranjeros. De hecho, la mayoría de los hombres registrados no eran mercaderes.

 

Figura 3. Ocupaciones de los extranjeros registrados.

 

Los motivos alegados tanto para la expulsión de 154 vecinos como a favor de la permanencia de otros 615, aparte de algunos casos de diferencias de opinión entre las autoridades en Laredo, subrayan la complicada y hasta paradójica integración de la gran mayoría de los miembros de las “naciones enemigas” en sus comunidades de residencia. Las situaciones laborales, matrimoniales, familiares y residenciales de los hombres denominados italianos, irlandeses y alemanes algunos denostados por las justicias locales, aunque exentos de la provisión real variaban poco y circunstancialmente de las de los otros extranjeros procedentes de territorios “enemigos”. Por otra parte, era casi imposible fijar y comprobar la fidelidad o rebeldía de los distintos pueblos holandeses mencionados, algunos indescifrables y otros desconocidos por las autoridades. En otros casos, se cifraba la cantidad de extranjeros “sin sospecha” de una determinada nación sin precisar los orígenes ni las circunstancias de cada miembro.

 

Como es normal al tratarse del antiguo régimen, una documentación elaborada con finalidades represivas revela el dinamismo y la resistencia de la misma sociedad que se pretendía controlar. Asimismo demuestra la fluidez de las distinciones que se pretendían establecer -- entre naturales y extranjeros, aliados y enemigos. Salen a relucir diferencias en torno no solamente al número y la procedencia, sino también al perfil social de los extranjeros en los puertos de cuatro zonas conectadas aunque diferenciables mediante el análisis con que se abordarán en el orden de su apariencia en el documento:  el puerto de Sevilla, seguido por los puertos de la costa Atlántica desde Ayamonte a Cádiz; los puertos de la costa Mediterránea desde Marbella a Cartagena; y, finalmente, los puertos del Mar Cantábrico de Irún a la Coruña.

 

El caso de Sevilla, el puerto y la zona con el mayor número de extranjeros registrados, fue paradigmático del uso estratégico y defensivo del censo por parte de los oficiales, sin dejar de tener en cuenta su dependencia económica en muchos de los mismos extranjeros. El asistente de Sevilla y conde de Puñonrostro, Francisco de Bobadilla, de acorde con su imagen como azote de malhechores en la obra de Cervantes[13], aprovechó la encuesta original para recomendar la expulsión de buena parte de la población foránea de la ciudad. Bobadilla denostó a 110 de los 172 “flamencos” que consideró potencialmente más dañinos que necesarios sin entrar en el estado de rebeldía o fidelidad de sus territorios de origen, al explicar “que no son arraygados y que son los que de ordinario sacan el dinero del reyno por la facilidad con que se van y vienen”. En particular, señaló a cinco flamencos “de peor condición”.[14] Por otra parte, el asistente mostró su “satisfacción y confianza” con 62 de los 172 flamencos, 36 de 38 franceses incluidos los propietarios de varias tiendas en la calle de Francos, y la totalidad de los 141 “italianos”, cuyas circunstancias no especificó por considerarlos por encima de cualquier sospecha. Entre los franceses y especialmente los flamencos, el asistente recomendó la expulsión de 59 de 110 mercaderes o hombres con negocios y de cada uno de los 30 criados mencionados, así como a 11 de 13 tenderos, 8 sastres, 4 de 7 toneleros, y 2 plateros, sin eximir a un flamenco “rico y antiguo en Sevilla” u otro con “muy buenos negocios” de la misma suerte, como se recoge en la Tabla 1. Claramente, el asistente deseaba librarse de elementos indeseables a la vez que evitar una fuga de capital que achacaba a los movimientos de algunos foráneos. Al parecer, sus bienes podían influir en, aunque no determinar, la consideración de los extranjeros por parte de la justicia.

 

Los oficiales se mostraron más condescendientes con los extranjeros que sobrevivieron el asedio anglo-holandés en el eje Sanlúcar de Barrameda-Cádiz, enumerados en las Tablas 2, 3 y 4. Aparte del secuestro de Lorenzo Simay, un “hombre de mucho caudal”, las tropas del conde de Essex llevaron presos a Guido Magon, originario de Vitré en Bretaña, y a Henrique Brecarte, natural de Frisia y alférez de su nación, un “hombre de caudal y de muchos negocios” que supuestamente perdió el juicio en cautividad. En algunos casos, resultaba difícil averiguar si los afectados habían sido víctimas o beneficiaros de la invasión: otro flamenco, Henrique Colen, se mudó de Sevilla a Cádiz después de la llegada de su hermano como capitán de la armada enemiga, calificado como “españolado de los más prácticos e inteligentes”, y otro flamenco, Juan Ogen, permaneció en Cádiz cuando su esposa, hijos y cuñada voluntariamente se marcharon con los invasores. Los estragos del duque de Essex posiblemente explican el hecho de que se registrasen solamente a 12 flamencos, 5 franceses y un alemán en Cádiz a principios de 1597 (sin enumerar varios “extranjeros de partes de Levante” por considerarlos sin sospecha y arraigados desde hace muchos años), aunque otros cinco flamencos y otro alemán en Cádiz que escaparon el registro en abril se harían notar en las exenciones a al expulsión acordadas en diciembre del mismo año. La práctica de la justica de Cádiz, don Antonio Osorio[15], de registrar los lugares originarios de los flamencos, refleja cierta dificultad a la hora de calificar los sitios como rebeldes o fieles, y mucho más a los flamencos que emigraron antes de la rebelión o buscaban refugiarse de la devastación posterior, como en el caso de Juan Antonio, residente en Cádiz y originario de Romesal, un pueblo “quemado por los herejes y bajo del agua”.

 

Entre los flamencos de Cádiz nos encontramos con el primero de tres cónsules de sus naciones mencionados en esta documentación: Cornieles de la Piedra[16], originario de Amberes, “ombre viejo casado con mujer natural de España”, con quien tenía hijos. A lo largo de más de 40 años de residencia en España, este flamenco propietario de una tienda de mercería con algunos bienes raíces, “ha tenido caudal aunque agora ha venido a menos”. Los otros dos cónsules mencionados residían en el Puerto de Santa María: un francés de Nantes, Juan de León, reubicado después de 20 años en Cádiz, y un holandés de Brabante, Cornieles Enríquez. Juan León, calificado como “pobre”, había residido más de 40 años en España, donde tenía a su mujer, hijos casados, nietos y las casas donde vivía con “un trato pequeño de lencería”, mientras servía como lengua del Santo Oficio. Asimismo mercader de lienzo y lengua de la Inquisición, el cónsul flamenco en el mismo puerto, Cornieles Enríquez, llevaba 30 años allí, estaba casado con una mujer flamenca y ostentaba una cédula real y licencia de la justicia para poder hospedar a extranjeros que querían comprar vinos. No nos sorprende la presencia, sino la modestia, de esos cónsules en la zona. Igualmente es de destacar la ausencia de referencias a los cónsules en otros puertos, circunstancia ya notada por López Martín.[17] Podría haber interesado a los cónsules así como a otros extranjeros intentar ocultar tanto sus cargos como sus posibles ingresos en la medida de lo posible para evitar los embargos y otras represalias. Quizás hubiera menos reticencia en la zona para declararse “capitán” o “capitán de su nación” (en 6 casos) o “alférez”/“alférez de su nación” (dos ejemplos), ya que la dimensión militar de esos cargos conllevaba la prestación de un servicio importante a la monarquía, así como en los casos de un guarda de la mar, tres artilleros, y cinco soldados registrados, o varios marineros que alegaban servicio en las armadas o hasta en la carrera de Indias como prueba de fidelidad a la corona.

 

No se puede descartar la posibilidad de cierta colusión entre los extranjeros encubiertos y las autoridades locales. Por lo general, los corregidores y justicias se esforzaron más en defender a los extranjeros que en denostarlos. En este respecto, es notable la actitud de la justicia de Ayamonte quien defendió a cuatro flamencos, dos ingleses y un único alemán afincados en su jurisdicción con declarar que todos vivían “bien y cristianamente”. De forma parecida, la justicia de Sanlúcar enumeró a 72 extranjeros bajo su autoridad que incluían al organista de la iglesia mayor, un pintor, tres barrilleros y 40 mercaderes, notablemente sin indicar sus años de residencia, para dictaminar, “que todos son personas seguras y de confianza y conviene que vivan allí” (Tabla 4). La concentración foránea, y especialmente flamenca, registrada en el Puerto de Sanlúcar, probablemente había aumentado con refugiados del saqueo de Cádiz.

 

Como es lógico, los flamencos eran más escasos en la costa Mediterránea desde Marbella a Cartagena, más marcada por la presencia francesa y genovesa entre las 48 personas registradas de forma individual más los “muchos” pescadores extranjeros que acudían a Mojácar de forma estacional, como se indica en la Tabla 5. Pese a los números de extranjeros más reducidos, la amenaza estratégica registrada por las justicias en el Mediterráneo fue mayor. Uno de seis holandeses residentes en Málaga, Diego Devida, fue a Cádiz para recibir y “regalar” al conde de Essex, según el corregidor, que recomendó su expulsión del puerto, conjuntamente con la de otros tres flamencos. La misma justicia, aunque dispuesta a tolerar a otro flamenco y a un francés, ambos casados con naturales, recomendó prohibirles acoger a extranjeros en sus casas, como aparentemente tenían por costumbre. La justicia de Mojácar, donde solamente vivía un irlandés, identificó mayor amenaza en “muchos extranjeros genoveses, alemanes, irlandeses y de otras naciones” – demasiados para enumerar -- que acudían al puerto para pescar desde los principios de octubre hasta finales de marzo todos los años, siendo, “gente pobre y de baja suerte”, para luego volver “a sus tierras donde pueden dar algunos avisos que sean de perjuicio". Los restantes extranjeros en Marbella, Almuñecar, Vera, Adra, Motril, Mazarrón y otros puertos de la zona fueron calificados como gente de “satisfacción y confianza”, y aparecen en la Tabla 5.

 

Es también notable la diversidad ocupacional entre los extranjeros registrados en esa región: hosteleros, pescadores, y marineros en su mayoría. Once foráneos, incluidos a seis genoveses afincados en Salobreña, trataban en azúcar y tenían ingenios arrendados. Paradójicamente también nos encontramos con dos regidores extranjeros: un genovés con cédula de naturaleza en Almuñécar, y Julián Junge, un mercader y capitán francés en Cartagena, propietario de tres naves. Pese la anomalía de la situación, el corregidor de Cartagena consideró conveniente mantener al regidor francés en la ciudad, “porque es ocasión de que aya en ella trato y comercio y se tiene mucha satisfacción del”.

 

La presencia francesa fue mayor en la costa Cantábrica, donde se identificaron a 163 franceses (con solamente 35 flamencos, 17 ingleses, 13 irlandeses, 10 italianos, etc.) entre los 254 extranjeros registrados en 22 puertos (Tablas 6-12). Una presencia de mano de obra originaria de los pueblos franceses del otro lado de la frontera es especialmente notable en los puertos del País Vasco. Asimismo nos encontramos, nuevamente, con una amplia gama de unas 39 distintas ocupaciones registradas, con números significantes de marineros (31), mercaderes (23), hosteleros (15), caseros en las caserías de la zona (9) y zapateros (9). De estos hombres, 25 se calificaron como “pobres” y otros 40 se explicitaron “sin bienes raíces”. Respecto a unos 5 irlandeses, 4 flamencos y 3 ingleses (incluido un organista) en Bayona, la justicia declaró: “que todos son pobres y de poco provecho y podrían ser de mucho daño, y que sería bien mandarlos salir de allí”. De manera similar, no obstante los informes favorables sobre los extranjeros de Santander, Laredo y de Castro de Urdiales, el corregidor consideró “que son de poco provecho y podrían ser de mucho daño”.[18] Otros corregidores compartían la opinión de que los mayores riesgos procedían de los hombres con los menores recursos.

           

            Los jueces también percibían una amenaza en los contactos que los extranjeros mantenían con personas en o de otros reinos. Entre los seis (de 23) ingleses recomendados para la expulsión estuvo Juanil de Vivero “porque dicen que [h]abra 4 años que dijo que tenía cartas de su padre de Inglaterra y trata con extranjeros que allí vienen y los visita y come con ellos.” Igualmente, la justicia de Bilbao recomendó desterrar a Juan Folin, residente durante 25 años, cuyos bienes habían sido tomados en el último embargo y devueltos por cédula real, por vender mercadería a los ingleses. En Lezo, el alquilador de mulas Navarro, Juanes de Ganboa, fue igualmente sospechoso por tratar con franceses y viajar frecuentemente a Francia. Como había sido el caso en Málaga, sus contactos con extranjeros también perjudicaron a los hosteleros a ojos del juez de la Coruña. Según este corregidor, los cinco extranjeros, incluidos dos “irlandeses” que residían en su jurisdicción:

 

     “acogen en su casa estranjeros yngleses y de otras partes que trata con los yngleses que se prenden y traen a aquella ciudad y los ayudan y favorecen. Algunos dellos salen fuera a contratar. Traen mercaderías que se entiende son algunos de Inglaterra. Que sospechan que pueden ser espías y dar algunos avisos a los ingleses que allí vienen y que conviene se metan la tierra adentro”[19].

 

            El contrabando pasaba por manos extranjeras, y no sería descabellado imaginar a los contrabandistas como expertos en la evasión del registro de sus bienes y, luego, personas. Aparte de una amenaza militar, la justicia temía el florecimiento del comercio ilegal. Excepcionalmente, la justicia de San Sebastían declaró no albergar “sospecha ningúna” respecto a los 48 foráneos en su jurisdicción, incluidos 5 hosteleros, 4 muleteros, un pintor y vidriero, y 9 mercaderes.

           

 

De la política defensiva a la política económica

 

Sin tener en cuenta los datos solicitados, en sendas provisiones el Rey y su Consejo Real procedieron a prohibir a los extranjeros de territorios “enemigos” dentro de 20 leguas de los puertos y del capital del reino. El dictamen de Felipe II, registrado con su rúbrica en una consulta del Consejo Real a finales de enero de 1597, fue que los franceses, ingleses, y holandeses de provincias y territorios rebeldes residentes en los puertos del reino “se metiesen la tierra adentro” a una distancia mínima de veinte leguas del mar y que se mantuvieron a la misma distancia de Madrid. Por supuesto, quedaría la posibilidad de que un inglés, francés u holandés que tuviera que acudir a un puerto o a la capital pudiera solicitar una licencia para evitar incurrir en la expulsión del reino y el perdimiento de la mitad de sus bienes. Al no estar afectados por estas medidas, los alemanes, italianos e irlandeses claramente se veían favorecidos, aún cuando algunos preocupaban a las justicias locales.[20]

 

La expulsión de los extranjeros “enemigos” de los puertos, finalmente decretada el 16 de abril de 1597, encontró especial resistencia en Sevilla, donde la promulgación pública de la medida se retrasó hasta el 29 de agosto. Es más, los regidores de la misma ciudad solicitaron la suspensión de su ejecución. Entre los motivos alegados en contra de la medida, los veinticuatro de Sevilla subrayaron la dependencia de su ciudad y de las rentas reales en el comercio facilitado por los mismos extranjeros amenazados con la expulsión. No solamente se trataba de los almojarifazgos, alcabalas y servicios, sino también de las sisas e imposiciones “para gastos de guerra y provisiones” en que el Rey ya debía casi un millón de ducados, “y esto todo se funda y compone del trato y comercio y de la entrada y salida de las mercancías y de la seguridad y quietud de los extranjeros que a esta ciudad las traen”. Los regidores argumentaron que la provisión real alteraba nuevamente la “quietud y habitación y morada” de los extranjeros, con gran “riesgo y daño… para la contratación y concurso de las mercancías”. Por otra parte, los regidores insistían en el alto grado de asimilación de los extranjeros en Sevilla:

 

     “siendo la mayor cantidad de las personas hombres que pasan de diez años hasta quarenta y cinquenta que viven y están casados en esta ciudad, como Cathólicos y de muy buena demostración de Cristiandad, con casas y heredamientos y tan olvidados de sus naturalezas y tan atentos a sus tratos y ganancias que no se puede presumir dellos que incurrirán en ningún deservicio de V. Md. ni de esta corona y que con gran gusto se [h]an procurado naturalizar con cartas de naturaleza de V. Md. Y casándose y emparentándose en esta ciudad ellos y sus hijos, perdiendo aun del todo la lengua y no usándola y habiendo acudido siempre al servicio de V. Md. en las ocasiones de guerra y paz con mucha prontitud y voluntad.”

 

            Los regidores protestaron la provisión real como injusta, innecesaria y dañina. Es más, declararon imposible aportar su parte de un servicio de quinientos millones de ducados recientemente otorgados al rey si no fuera mediante impuestos sobre el comercio, que dependía en gran parte de los extranjeros, especialmente después de unos años de grandes inundaciones, pestilencias, y esterilidad en los campos.[21] La petición de los regidores resultó especialmente elocuente en subrayar la importancia económica de las comunidades extranjeras cuya expulsión de los puertos perjudicaría sustancialmente las finanzas y por lo tanto, la defensa de la monarquía.

 

            A la vista de las circunstancias alegadas, el Consejo Real suspendió la aplicación del decreto y recomendó que un juez de la Audiencia de Sevilla volviese a repetir la encuesta original referente a los franceses, ingleses y flamencos, “y que tanto tiempo que residen allí y que bienes tienen y si son casados con naturales o extranjeros y que hijos tienen y de su trato y manera de vivir” para poder determinar a quién convendría mandar fuera la ciudad y quien podría permanecer.[22] Como era de esperar, cuánto más intentaba abarcar la burocracia más se le escapaba. Mientras tanto seguía el comercio y, probablemente en menor grado, la recaudación.

 

Al surgir dudas y suceder retrasos en la aplicación de la medida decretada, algunos extranjeros se apresuraron en conseguir exenciones a la misma. Un elenco de exenciones particulares concedidas en Madrid el 10 de diciembre de 1597 para 18 extranjeros recogía 14 casos no contemplados en la primera encuesta (claramente demostrando que no incluía a todos los extranjeros), e información nueva en torno a 3 individuos, haciendo hincapié en su vecindad en los lugares donde deseaban permanecer, sin indicar sus oficios. El flamenco Jacques Nicolás, considerado por el asistente de Sevilla entre los indeseables “de peor condición”, consiguió que se le registrase a posteriori como “vecino de Sevilla” durante más de 16 años, casado con una mujer natural, con casas y posesiones y como lengua del Santo Oficio. Es más, alegaba “[h]aver socorrido en tiempos a Sevilla con mucha cantidad de pan” sin tener “comunicación con gente de su tierra ni con otra extranjera”. Datos contradictorios también surgían en el caso de Lorenzo Somay o Simay – cuya exención calificaba a su esposa como natural, a diferencia del primer informe, y omitía cualquier referencia a su rapto por la Armada inglesa. Juan Oguen, cuya mujer se había fugado con la Armada, consiguió una exención al obviar este acontecimiento y declarar que había residido durante más de 10 años en Cádiz y Sanlúcar (a diferencia del único año de residencia inicialmente constatado en Cádiz). Otro “extranjero” en la encuesta original, el carpintero y tallador, Isaac de Amberes, consiguió que se le calificasen como “natural” de Cádiz tras 20 años de residencia. Los mismos individuos resaltaron, callaron o enfocaron sus datos para la ocasión. Ignoramos si más exenciones fuesen solicitadas y concedidas, o si realmente se llegase a aplicar el decreto en algún caso.

 

Más allá que su posible ejecución, se puede aventurar que el decreto aumentó la inseguridad de muchos extranjeros en tiempos de guerra. Aunque no se ejecutara de forma rigurosa ni uniforme, conjuntamente con los embargos, la medida no podría sino perturbar la “quietud y habitación y morada” de los extranjeros que residían en los puertos, incluidos a los que no fuesen mercaderes y que carecían de medios económicos.

 

Pese la dificultad de medir el verdadero impacto de la medida en los puertos a finales del Siglo XVI, su recuerdo es visible en la reformación de la Pragmática de Felipe IV de 1623. Esta pragmática, al invitar a los extranjeros “Católicos y amigos de la Corona para venir a ejercitar sus oficios en estos reynos”, constató la obligación de los inmigrantes no solamente de ejercer algún oficio o labor, sino también la de residir “veinte leguas de la tierra adentro de los puertos”. Pudiesen o no reubicar a algunos extranjeros en 1597, las autoridades no cesaron en su empeñó de poblar el interior de la península con inmigrantes menos deseables en los puertos, donde otros conseguían ocultar o re-definir sus personas, bienes y naturaleza.

 

 


Tabla 1. Extranjeros registrados en Sevilla en 1597 (en orden alfabético por nación y, luego, por apellido)

[+Los nombres indicados se han transcrito literalmente como un primer paso para facilitar su identificación por parte de especialistas en las distintas regiones y poblaciones.

*Fran = “francés”; Fla = “flamenco”, etc.

**S = soltero; C = casado; V = viudo; CN = casado con “hija de natural”; CFr = casado con “francesa”, CFla = casado con “flamenca”, etc.]

 

NOMBRE+

NACIÓN*

ESTADO CIVIL**

HIJOS

INFORMACIÓN ADICIONAL FACILITADA

OFICIO(s)

¿”satisfacción y confianza”?

1.        Guillen, Alonso

Escocés

CN

tiene hacienda

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

2.        Abril, Juan de

Fla

C

No

3.        Anbeus, Selman

Fla

C

negocios

No

4.        Antonio

Fla

tonelero

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

5.        Antonio, Nicolás

Fla

S

"nacido en Sevilla y rico"

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

6.        Arnao, Roverto

Fla

S

antiguo

negocios, buenos

No

7.        Ayala, Tomás de

Fla

mercader

No

8.        Baldimen, Gaspar

Fla

negocios, moderados

No

9.        Banbolin, Estevan

Fla

sirve

No

10.    Banchelman, Giraldo

Fla

"tiene tienda en la calle Franco"

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

11.    Banguesel, Andrés

Fla

S

negocios

No

12.    Baños, Simón

Fla

mercader vidriero

No

13.    Baopres, Arnao

Fla

S

negocios, pocos

No

14.    Barquera, Pablos

Fla

C

No

15.    Bartolomé, Baltasar

Fla

C

mercader

No

16.    Baysen, Libro

Fla

mercader

No

17.    Belen, Mateo

Fla

C

sastre

No

18.    Belerens, Juan

Fla

sirve

No

19.    Benalequen, Juan

Fla

sastre

No

20.    Benmeltense, Henrrique

Fla

sastre

No

21.    Benserna, Juan de la

Fla

S

negocios, pocos

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

22.    Bequer, Sebastián

Fla

sirve

No

23.    Beren, Juan

Fla

C

negocios

No

24.    Bermulen, Lorenzo

Fla

S

negocios, pocos

No

25.    Bernal, Juan

Fla

C

hijo (Pedro)

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

26.    Bernal, Pedro

Fla

mercader

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

27.    Bestoven, Juan de

Fla

trata en madera

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

28.    Bevilen, Lanberto

Fla

C

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

29.    Bilán, Nicolás

Fla

C

negocios,pocos

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

30.    Biuelti, Jaques

Fla

sirve

No

31.    Blasque, Pedro

Fla

S

sastre

No

32.    Bosque, Luis

Fla

C

No

33.    Bovato, Gilberto

Fla

S

mercader

No

34.    Brausen o Brauser, Jaques

Fla

Viudo

negocios, buenos

No, "de peor condición"

35.    Broundeguien, Antonio

Fla

S

negocios

No

36.    Bruque, Tovias

Fla

C

mercader

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

37.    Bruselis, Henrrique

Fla

sastre

No

38.    Buriel, Estevan

Fla

negocios, buenos

No

39.    Busin, Juan de

Fla

mercader

No

40.    Buyen, Jaques

Fla

S

negocios, buenos

No

41.    Calvar o Calver, Francisco

Fla

negocios, buenos

No, "de peor condición"

42.    Candon, Jusepe

Fla

C

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

43.    Canes, Justo

Fla

CN

hijos

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

44.    Carlier, Gaspar

Fla

"es antiguo en Sevilla"

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

45.    Cervantes, Pedro

Fla

S

negocios

No

46.    Ciervo, Giraldo del

Fla

C

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

47.    Clui, Lucas

Fla

CN

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

48.    Conique, Francisco de

Fla

S

"soltero y rico"

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

49.    Coquelan, Juan

Fla

C

mercader

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

50.    Corense, Guillermo

Fla

C

trata en madera

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

51.    Corince, Guillermo

Fla

C

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

52.    Cornelis, Juan

Fla

sirve

No

53.    Corvet, Pablo

Fla

hermano de Pedro Corvet

mercader

No

54.    Corvet, Pedro

Fla

hermano de Pablo Corvet

mercader

No

55.    Corvet, Roverto

Fla

C

hijos

Rico

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

56.    Crave, Arnaldo

Fla

C

hijos

tiene hacienda

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

57.    Danies, Cornelio

Fla

sirve a Pedro Gu[tierre]s

No

58.    Debie, Justo

Fla

S

negocios

No

59.    Demenes, Sistis

Fla

S

mercader

No

60.    Doon o Don, Mateo

Fla

C

negocios, buenos

No, "de peor condición"

61.    Elican, Guillermo

Fla

sirve

No

62.    Elners, Francisco

Fla

sirve

No

63.    Elter, Jaques

Fla

C

negocios

No

64.    Enandi, Jaques

Fla

en casa de Roverto Arnao

No

65.    Enriquez, Agustín

Fla

C

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

66.    Enriquez, Josephe

Fla

S

mercader

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

67.    Enriquez, Simón

Fla

mercader

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

68.    Entelen, Henrrique

Fla

sirve

No

69.    Escoche, Alverto

Fla

C

sastre

Si

70.    Eselt, Alverto

Fla

CFla

negocios

No

71.    Espiquer, Jaques

Fla

S

negocios moderados

No

72.    Estesive,Baltasar

Fla

C

sirve

No

73.    Fadrique, Miguel

Fla

negocios, pocos

No

74.    Flores, Francisco

Fla

C

negocios

No

75.    Florido, Juan

Fla

C

"tiene buenos negocios"

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

76.    Francisco, Pedro

Fla

C

mercader

Si

77.    Franco, Nicolás

Fla

sirve

No

78.    Gain, Gronecio

Fla

nacido en España, hijo de Flamenco

No

79.    Geldof, Lorenzo

Fla

negocios moderados

No

80.    Gil, Pedro

Fla

C

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

81.    Godin, Felipe

Fla

S

"trata en cantidad"

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

82.    Goudeon, Juan

Fla

negocios, buenos

No

83.    Granier, Nicolás

Fla

S

mercader

No

84.    Gras, Juan

Fla

S

trata en madera

tendero

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

85.    Guante, Juan

Fla

sobrino de Jaques Elter

sonbrerero

No

86.    Hance, Guillermo

Fla

mercader

No

87.    Helman, Pedro

Fla

S

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

88.    Hervian, Miguel

Fla

sirve

No

89.    Hustas, Pedro

Fla

S

mercader

No

90.    Isbant, Pedro

Fla

sirve

No

91.    Jiraldo, Juan

Fla

C

 antiguo en Sevilla

mercader

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

92.    Jones, Cornelio

Fla

trata en madera y pertrechos de naos

No

93.    Juan Luis

Fla

sirve

No

94.    Juansen, Herónimo

Fla

S

negocios, buenos

No

95.    Junes, Pedro

Fla

S

tonelero

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

96.    Landra, Nicolás de

Fla

C

negocios

No

97.    Lanuy, Marcos de

Fla

C

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

98.    Lapidario, Jaques

Fla

C

cofrero

No

99.    Lau, Pedro

Fla

carpintero

No

100.Leydar, Lazaro de

Fla

C

mercader

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

101.Liejo, Corniel

Fla

tonelero

No

102.Lonches, Melchior de

Fla

S

tonelero

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

103.Loranes, Pablo

Fla

sirve

No

104.Lovaina, Belez de

Fla

C

mercader

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

105.Luibier, Juan

Fla

S

mercader

No

106.Luna, Guillermo de la

Fla

platero

No

107.Mapilan

Fla

sirve

No

108.Matias

Fla

S

tonelero

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

109.Mauceles, Uberto

Fla

sirve

No

110.Miles, Carlos

Fla

sirve

No

111.Molier, Pedro

Fla

C

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

112.Mulute, Bernardino

Fla

S

mercader

No

113.Neves, Miguel de

Fla

C

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

114.Nicolás, Diego

Fla

S

mercader

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

115.Nicolás, Jacques

Fla

a 30 años que está en Sevilla

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”; exención 4 del 17.12.1597

116.Noo, Guillermo

Fla

espadero

No

117.Nueves, Andrés de

Fla

mozo que sirve

sirve

No

118.Nulan, Francisco

Fla

C

"buenos negocios"

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

119.Nurot, Roverto

Fla

C

antiguo en Sevilla

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

120.Otres, Giles

Fla

S

mercader

No

121.Parte, Henrique

Fla

C

Ynquieto

No, "de peor condición"

122.Pelegrin, Juan

Fla

S

negocios, pocos

No

123.Peralta, Hernando de

Fla

sirve

No

124.Percer, Boneter

Fla

sirve

No

125.Perez, Lane

Fla

C

sastre

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

126.Perverque, Lucas de

Fla

S

mercader

No

127.Piamont

Fla

C

negocios

No

128.Pierres, Henrique de

Fla

C

mercader

No

129.Pipar, Luis de

Fla

sirve

No

130.Plunogen, Martín

Fla

S

sedero

No

131.Poens, Daniel

Fla

 negocios, buenos

No

132.Ponce, Daniel

Fla

mercader

No

133.Pradis, Salamon

Fla

sirve

No

134.Pros, Bartolomé

Fla

S

negocios, buenos

135.Raet, Francisco de

Fla

negocios, buenos

No

136.Ramos, Diego

Fla

C

negocios

No

137.Reyes, Melchor de los

Fla

C

negocios, buenos

No, "de peor condición"

138.Reynaldos

Fla

aceitero

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

139.Reyno, Monte

Fla

mercader

No

140.Ripet, Anival

Fla

V

negocios, buenos

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

141.Rosen, Juan

Fla

tonelero

No

142.Rrolante, Francisco

Fla

C

mercader

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

143.Santiago, Pedro de

Fla

C

negocios, buenos

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

144.Saubone, Jaques

Fla

S

mercader

No

145.Saun Victien, Rodrigo

Fla

sirve

No

146.Seinan, Abrahan

Fla

criado del dicho (Lucas de Perverque)

No

147.Sequile, Corrado

Fla

S

mercader

No

148.Sirman, Elias

Fla

negocios, buenos

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

149.Sus, Pedro

Fla

S

negocios, buenos

No

150.Tivavi, Giraldo

Fla

S

mercader

No

151.Van de Straten, Juan

Fla

S

"muy buenos negocios"

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

152.Vanbasen, Juan

Fla

S

negocios, buenos

No

153.VanBesemal, Luis

Fla

C

mercader

No

154.Vandebanber, Jaques de

Fla

sirve a Andrés Plamon

No

155.Vandehaguen, Joos

Fla

sirve

No

156.Vandelimen, Lucas

Fla

sirve

No

157.Vandemata, Alverto

Fla

C

negocios, pocos

No

158.Vanderlinder, Pedro

Fla

C

negocios, buenos

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

159.Vandosten, Juan

Fla

S

negocios moderados

No

160.Vanenbruguen, Juan

Fla

C

"muy buenos negocios"

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

161.Vanhoren, Juan

Fla

S

negocios

No

162.VanHorse, Rodrigo

Fla

sirve

Si

163.Vanquelase, Andrés

Fla

sirve

No

164.Vanveatensi, Cornelio

Fla

tonelero

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

165.Vequer, Adan

Fla

CN

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

166.Vermeren, Juan

Fla

C

hijos

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

167.Villa María, Henrique de

Fla

C

mercader

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

 

168.Vitendi, Dequer

Fla

S

mercader

No

 

169.Viudel, Odolfo

Fla

S

negocios

No

 

170.Ynquelman, Juan

Fla

CN

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

 

171.Plamont, Andres

Fla ("borgoñón")

CN

hijos

tiene hacienda y una heredad en Castilleja

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

 

172.Demila, ?

Fla?

C

hermano de Juan Demila

No

 

173.Demila, Juan

Fla?

C

hermano de ? Demila

No

 

174.Abel

Fr

C

verdugero [sic]

 

175.Aldaya, Monsur

Fr

S

mercader

 

176.Antonaque, Pedro de

Fr

tiene tienda en cal de Francos

tendero

No

 

177.Babulete, Gaspar

Fr

No, "mal reputado"

 

178.Banquedote, Juan

Fr

C

mercader

 

179.Bilete, Monsur

Fr

S

mercader

 

180.Blanco, Nicolás

Fr

C

hermano de Pedro Blanco

tonelero

 

181.Blanco, Pedro

Fr

hermano de Nicolás Blanco

mercader

 

182.Bues, Jorje de

Fr

S

 

183.Charte, Pedro Antonio

Fr

C

negocios

 

184.Colón, Sanson

Fr

tiene tienda en cal de Francos

tendero

No, de peor condición

 

185.Denosus, Pedro

Fr

en casa de Harnao Dufau

 

186.DeVries, Jorje

Fr

S

 

187.Dubues, Manuel

Fr

C

 

188.Dufau, Harnao

Fr

S

tiene casa de trato y tiene tres o quatro franceses en su casa

 

189.Fabre, Antonio

Fr

 

190.Faviano, Flaude

Fr

S

mercader

 

191.Flaude

Fr

platero

 

192.Guibel, Juan

Fr

en cal de Scovas

lencero

 

193.Guillermo

Fr

cofrero

 

194.Juan Antonio

Fr

tiene tienda en cal de Francos

tendero

No

 

195.Juan Antonio

Fr

tiene tienda en cal de Francos; [¿duplicado?]

tendero

No

 

196.Le Crerque, Juan

Fr

C

tiene bienes raices

 

197.Lecrerque, Julián

Fr

C

tiene muchas encomiendas

mercader

 

198.Lecrerque, Pedro

Fr

S

hermano de Julián Lecrerque, rico

mercader

 

199.Lene Fiatices, Guillermo

Fr

C

tiene casa de trato y tiene franceses en su casa

No, "mal reputado"

 

200.Lonete, Monsur

Fr

S

mercader

 

201.Moriel, Pedro

Fr

C

mercader

 

202.Orosus, Pedro de

Fr

en casa de Harnao Dufau

 

203.Portugués, Antonio

Fr

S

tiene tienda en cal de Francos

tendero

No

 

204.Sagete, Antonio

Fr

librero

 

205.Sandiel, Jorje

Fr

tiene tienda en cal de Francos

tendero

No

 

206.Sandiel, Jorje

Fr

 en cal de Francos; [¿duplicado?]

mercader

No

 

207.Sastre, Francisco

Fr

C

tiene casa de trato y tiene franceses en su casa

Si

 

208.Siprera, Jusepe de

Fr

S

mercader

 

209.Sognin, Jacques

Fr

rico, fator de Bretones

mercader

 

210.Telier, Graviel

Fr

C

mercader

 

211.Helman, Francisco

"rico y antiguo en Sevilla"

negocios

Sí, entre los “arraygados y de mucho caudal”

 

141

“Italianos”

 

cursiva = número impreciso

 

 


Tabla 2. Extranjeros registrados en Cádiz en 1597 (en orden alfabético por apellido)

 

NOMBRE

NACIÓN

ESTADO CIVIL

HIJOS

INFORMACIÓN ADICIONAL FACILITADA

OFICIO(s)

¿”satisfacción y confianza”?

1.   Amberes, Isaac de

Fla de Amberes

CFla

de edad, reside 18 años, bienes raíces

carpintero entallador

sí + exención

2.   Brecarte, Henrique

Fla de Frisia

CN

hijos

mozo, reside mas de 24 años, bienes raices, cédula de naturaleza, "a sido hombre de caudal y de muchos negocios, fue rrobado del enemigo y cautivo y se dice que le a faltado allá el juicio"

alferéz

3.   Cauches, Luis

Fr de Roan

V

hija

viejo, más que 50 años en Cádiz, "donde tuvo mucho caudal… ha venido en pobreza"; hija viuda que fue casada con un francés

4.   Colen, Henrique

Fla de Bravante

CFla

mujer Fla nacida en Sevilla, reside 14 años en España, "a se ydo a vivir a aquella ciudad después de la yda del enemigo; "y es público que en la armada enemiga vino un hermano deste capitán españolado de los más práticos e ynteligentes"

No

5.   El Patrón

Alemán

S

viejo lisiado, más de 20 años en Cádiz y San Lucar, acoje en su casa

hostelero

6.   Enríquez, Hernando

Fla de Bruselas

Cfla

mozo, mujer y su madre nacidas en Cádiz, residió 18 años pero "avia un año que fue a su tierra y la muger está sola en casa suya propia"

sastre

7.   Jacome, Barbant

Fla de Leiden

CN

hijo

mozo, reside más que 10 años, tienda de mercería

tendero

8.   Magon, Guido

Fr de Vitré

CN

hijos

más de 20 años, cédula de naturaleza, "robado del enemigo"

9.   Oje, Juan

Fla de Brujas

CFla

1 año en Cádiz; "casó con una muger viuda flamenca, la qual con dos hijos del primer marido y con dos hijos del primer marido y con dos hermanas y la una con su marido y sus hijos se fueron en la armada enemiga de su voluntad"

No pero exención

10.              Paris, Juan de

Fr de Paris

CN

hijo

de edad, enfermo, más de 20 años en Cádiz, tienda de merceria

tendero

11.              Piedra, Cornieles de la

Fla de Amberes

CN

hijos

"ombre viejo… a mas de 40 años que reside en España… a tenido caudal aunque agora ha venido a menos, y tiene tienda de mercería y algunos bienes raices"

consul, tendero

12.              Rey, Jacome

Fla

Cfla

hijos

30 años en Cádiz, bienes raices, cédula de naturaleza

negocios

13.              Rodríguez, Adolfo

Fla de Amsterdam

Cfla

hijos

onbre mozo, 20 años de residencia en Cádiz; mujer flamenca n. en Cádiz; bienes raices

negocios

14.              Rodríguez, Juan

Fla de Amsterdam

CN

hijos

mozo, reside en Cádiz a 30 años desde su niñez, lengua del S.O., "y hace negocios de otros"

negocios

15.              Roncin, Pedro

Fr de Vitré

CN

en España desde su niñez, bienes raices

negocios

16.              Somay/Simay, Lorenzo

Fla

CFla

hijos

20 años en Sevilla y Cádiz, bienes raices, cédula de naturaleza; robado, "hombre de mucho caudal fue cautio y rovado del enemigo y no a buelto"; mujer flamenca nacida en Cádiz

capitán

Sí + exención

17.              Vera, Hernando de

Fla de Campen

CN

hijos

mozo, 20 años en España, tienda de mercería, lengua del Santo Oficio

tendero

18.              “muchos extranjeros”

"del parte de Levante"

CN

hijos

bienes raices, "personas de confianza y seguridad", residen muchos años

cursiva = número impreciso

 

 

 

Tabla 2b. Extranjeros de Cádiz no contemplados en el documento anterior, quienes consiguieron exenciones frente la expulsión decretada

NOMBRE

NACIÓN*

ESTADO CIVIL**

HIJOS

INFORMACIÓN ADICIONAL FACILITADA

OFICIO(s)

  1. Antonio, Juan

Fla de Romesal, quemado por los herejes y bajo del agua

CN

4 hijos

más de 15 años en Cádiz, se casó con María Giralda

  1. Enríquez, Giralda

Fla de Vilbort 2 leguas de Bruselas

C

hijos

tercera muger de Guillermo Enríquez, casados más que 14 años, "que quando los enemigos saquearon a Cádiz le llevaron su hacienda y cautivaron a su marido y lo tienen oy pediendo rescate"

  1. Gutierrez, Cristóbal

Fla de Brujas

CN

casado con Ana Michaela, "tiene casa y bienes. A servido en la jornada de la Tercera y de Portogal y en otras ocasiones"

soldado

  1. Joan, Rodrigo

Fla de Amberes

CN

hijos

reside más de 15 años, se casó con Catalina Baruosa hace más de 8, sin salir, casa y bienes

  1. Oguen, Juan

Fla de Brujas

C

hijos

reside más que 10 años en Cádiz y en Sanlúcar, bienes muebles y raices

  1. Pérez, Diego

Fla de Honscot

CN

hijos

reside más de 10 años

  1. Rentorpe, Hernán

Alemán

vecino de Cádiz, hijo de Joachin Rentorpe e Isabel su mujer, difuntos, originarios de Lunanburque

  1. Usbel, Erasmo

Fla de Emberes

C

vino a Cádiz mozo de 20 años

 


Tabla 3. Extranjeros registrados en el Puerto de Santa María en 1597, siendo todos de “satisfacción y confianza”

 

NOMBRE

NACIÓN

ESTADO CIVIL

HIJOS

INFORMACIÓN ADICIONAL FACILITADA

OFICIO(s)

  1. Blanco, Pedro

Fla de Brujas

 

4 años en el Puerto, "está con Juan Juanes aprendiendo el oficio de tonelero"

aprendiz de tonelero

  1. Buenjardin, Andrea

It de Traparia, Reino de Sicilia

Csic

6 hijos

reside 6 años él y su mujer, "tiene una tienda de mercería, no tiene bienees raices"

tendero

  1. Cortés, Andrés

Fla de Anberes

S

reside 6 años, "tiene algunos tratos de vinos que compra", "no tiene bienes raices"

tratante en vinos

  1. Enberes, Rodrigo de

Fla de Amberes

CN

hijo

8 años en Castilla y 3 en el Puerto, no tiene bienes

aguadentero

  1. Enríquez, Cornieles

Fla de Bravante

CFla

reside más que 30 años, mercader de lienzo, lengua del S.O., cédula y licencia "para hospedar extranjeros que vienen a comprar vinos"

consul, mercader

  1. Giraldo, Jorje

Fla de Anascose

CFla

reside 10 años, no tiene bienes

aguadentero

  1. Guillermo, Jeremias

Fla de Minonburque

CN

28 años en el Puerto y Jerez

aguadentero

  1. Juanes, Juan

Fla de Amberes

CFla

hijos

reside 20 años, tonelero, hace agua ardiente

tonelero, aguardentero

  1. León, Juan de

Fr de Nantes

CN

hijos

más que 55 años de edad, y más que 20 en Cádiz, nietos, bienes raices, "es consul de su nación de muchos años a esta parte; lengua del S.O., "es pobre, tiene unas casas en que vive y un trato pequeño de lenceria"

consul, tratante de lencería

  1. Rodríguez, Diego

Alemán de Estenburque

CN

3 hijos

40 años en el Puerto, tiene unas casas y no otros bienes

sastre

 


Tabla 4. Extranjeros registrados en Ayamonte, Puerto Real, Chipiona y Rota, todos de “satisfacción y confianza”

 

PUEBLO

NOMBRE

NACIÓN

ESTADO CIVIL

HIJOS

INFORMACIÓN ADICIONAL FACILITADA

OFICIO(s)

Ayamonte

1.  Abad, Juan

Inglés

CN

4 hijos

reside más de 20 años, bienes raíces, interprete del S.O.

 

Ayamonte

2.  Arbion, Peres

Inglés

CN

1 hija

reside 16 años, tiene unas casas, lengua del S.O.

mercader

Ayamonte

3.  Clas, Simón

Fla

Cfla

reside 10 años, no tiene bienes raices

tonelero

Ayamonte

4.  Cruz, Miguel de la

Alemán

CN

no

reside 6 años, "tiene casas y viñas y tierras que le dieron en dote"

mercader

Ayamonte

5.  Rojel, Henrique

Fla

V

fue casado con hija de natural, reside 1 año, no tiene bienes raices

mercader

Ayamonte

6.  Sagres, Juan

Fla

Cing

reside 1 año, "6 meses que se casó con hija de ynglés y de muger natural de aquella villa, tiene casas y unas viñas que le dieron en dote con su mujer"

 

Ayamonte

7.  Simón, Juan

Fla

CFlaPor

hijo

reside 3 años, casado con hija de flamenco y portuguesa nacida en aquella villa", tienda de especería y lienzo, casas en que vive

tendero

Puerto Real

8.  ---

It

"son Arragoceses, Genoveses [e] Ytalianos los quales se an quedado en aquella villa para sacar sus mercadurias"

 

Chipiona

9.  ---

Fla

C

hijos

se fue de Cádiz a aquella villa hace un año

tonelero, aguardentero

Rota

10.              Giraldo, Guillermo

Fla

Cfla

4 hijos

edad de 50 años, 20 en Rota, "tiene biñas y hacienda. Dicen que es buen cristiano"

tonelero, aguardentero

 

 


Tabla 5. Extranjeros registrados en Sanlúcar, siendo todos de “satisfacción y confianza”

 

NOMBRE

NACIÓN

ESTADO CIVIL

HIJOS

INFORMACIÓN ADICIONAL FACILITADA

OFICIO(s)

  1. Adriangen, Cornieles

Fla de Amberes

Cfla

hijos

casado con hija de flamencos, bienes raices

mercader

  1. Aguila, Pedro del

Fla de Bruselas

CN

hijos

casas propias

latonero

  1. Aponte, Carlos de

Fla de Amberes

CN

hijos

"a sido mercader… solicita pleitos por flamencos"

mercader, procurador

  1. Armandias, Juan de

Francés de Yberniga [¿Auvernia?]

CN

hijos

mercader

  1. Baninguen, Martín

Fla de Amberes

Cfla

hijos

artillero en el castillo de Sant Lucar, mercader de especeria

mercader, artillero

  1. Barbol, Tomás

Fla de Brabancia

Cfla

hijos

"casado con hija de flamencos"

mercader

  1. Basín, Julián

Bretón de Vitré

S

sastre

  1. Belens, Gaspar

Fla de Amberes

Cfla

hijos

mercader de merceria

  1. Belesteden, Henrique

Alemán

V

hijos

bienes raices, "casado con natural del reyno hija de flamencos. Es viudo"

mercader

  1. Betancor, Antonio de

Fr de Ruan

Cbretona

hijos

mercader y encomendero

mercader, encomendero

  1. Biehao, Pedro

Bretón de Vitré

S

mozo, mercader de paños y sedas

mercader

  1. Billete, Juan

Fla de Frisia

Cfla

hijos

tiene tienda de mercería

platero, tendero

  1. Blanco, Juan

Fra de Niuan?

CFr

no

casado con hija de francés

mercader

  1. Bruynsel, Melchor Francisco

Fla de Amberes

Cpor

hijos

mercader

  1. Calvo, Juan

Bretón de Vitré

mercader de lienzos y mercería

 

mercader

  1. Cambi, Guillermo de

Fla de Anveres

Cfla

hijos

bienes raices

mercader

  1. Cheyoue, Reynaldo

Fla de Malinas

Cfla

no

mercader

  1. Corte, Guillermo

Inglés

S

"reside en casa de la viuda de Juan Hance, flamenco"

 

  1. Cortín, Guillón

Bretón de Vitré

CN

hijos

bienes raices

mercader

  1. Davis, Guillermo

Inglés

Cfla

no

bienes raices

mercader

  1. Dinones, Juan

Bretón de Vitré

C

hijos

naturalizado

capitán

  1. Dux, Jaques

Alemán

CN

no

arcabucero

  1. Enríquez, Baltasar

Fla de Amberes

Cfla

no

casado con hija de flamencos

barrilero

  1. Enríquez, Pedro

Fla de Amberes

CN

no

"vive de hacer salchichas"

vendedor

  1. Estimiel, Bartolomé

Fla

CN

hijos

platero

  1. Gerbrangen, Jaques

Fla de Amsterdam

CN

hijos

mercader

  1. German, Adrián

Fla de Lilo [¿Lillo?] junto a Amberes

CN

hijos

vende vino

vendedor de vino

  1. Gregorio, Juan

Fla de Amsterdam

S

mozo, carpintero sarjento de los flamencos

carpintero, sargento

  1. Griz, Angelo

Fla de Amberes

CN

hijos

sastre

  1. Guihan, Juan

Bretón de Saint-Malo

CBretona

hijos

mercader

  1. Guillán, Francisco

Bretón de Vitré

Cfla

hijos

casado con hija de flamenco

 

  1. Hance Escote, Juan

 

Cfla

hijos

bienes raices

mercader, capitán de su nación

  1. Harrode, Nicolás

Inglés

Cfla

hijos

casado con hija de flamencos

mercader

  1. Haya, Juan de la

Fla de Amberes

CN

hijos

"hace viajes a Flandes"

mercader

  1. Jaques, Nicolás

Fla de Astradame (Amsterdam)

CN

hijos

bienes raices; "hace viajes a Indias . A servido a V. Mag. en armadas"

condestable de artilleria

  1. Jaymes, Tomás

Inglés

S

"tiene su vivienda en las casas yglesia del señor San Jorje con los clerigos yngleses"; interprete del S.O.

interprete

  1. Jifiarte, Guillermo

Bretón de Vitré

S

mozo, tiene casa y cédula de V. Magd de naturaleza

mercader

  1. Joli, Jaques de

Fla de Dunquerque

Cgallega

hijos

casado con Gallega

cirujano

  1. Juan Pedro

Flamenco de Astredama (Amsterdam)

Cfla

hijos

organista de la iglesia mayor de Sanlucar

músico

  1. Juanes, Andrés

Fla de Brabancia

V

hijos

fue casado con flamenca

mercader

  1. Juanes, Andrés (ii)

Fla de Astradam (Amsterdam)

S

mozo, mercader de mercería

mercader de mercería

  1. Juanes, Gutierre

Fla de Amberes

Cfla

hijos

casado con hija de flamencos

barrilero, tonelero

  1. Lemuena, Francisco

Bretón de Vitré

CN

bienes raices, hermano de Jacques Lemuena, repetido del N. 37

mercader

  1. Lemuena, Jaques

Bretón de Vitré

S

hermano de Francisco Lemuena

mercader

  1. Liste, Nicolás

Alemán

Cfla

no

casado con hija de flamenco y española, bienes raices

mercader

  1. Lorenzo, Rodrigo

Fla de Amsterdam

Cfla

no

sastre

  1. Lucas, Francisco

Fla de Amsterdam

Cfla

hijos

"casado con hija de flamencos", bienes raices

mercader, alferéz de su nación

  1. Magon, Guido

Bretón de Vitré

Cfla

hijos

casado con hija de flamencos; [hombre del mismo nombre raptado de Cádiz a manos inglesas]

mercader

  1. Mar, Jorge de la

Fla de Amnberes

Cfla

hijos

barrilero, tonelero

  1. Mardeos, Juan de

Bretón de Vitré

V

estante en la corte y es naturalizado

mercader

  1. Mayer, Carlos de

Fla de Amnberes

Cfla

hijos

bienes raices

mercader

  1. Mercedes, David

Fla de Olanda

CN

hijos

privado de vista

arcabucero

  1. Molin, Juan de

Fla de Amberes

CN

no

mercader de merceria y pintor

mercader de merceria, pintor

  1. Molina, Bartolomé de

Fla de Bruselas

CN

hijos

casas propias

mercader

  1. Moncarte, Andrés

Fla de Amberes

CN

hijos

Artillero

  1. Moncarte, Jil

Fla de Amberes

Cfla

no

mercader de merceria

mercader de merceria

  1. Muneu, Jil

Bretón de Vitré

CFla

casado con hija de Flamenco y Española

mercader

  1. Noncaro, Nicolás

Fr de Ruan

CN

hijos

casado con natural de Sanlucar hija de flamencos

mercader

  1. Osten, Pedro

Fla de Bela junto a Brujas

Cfla

hijos

tiene casa, mercader de merceria

mercader de mercería

  1. Polin, Nicolás

Francés de Ruan

S

Mozo

mercader

  1. Pradao, Francisco

Francés de Uberniga [Auvernia]

V

hijos

fue casado con española, bienes raices

Caldero

  1. Quenbal, Guillermo

Bretón de Saint-Malo

CBretona

hijos

"naturalizado en estos reynos" (repetido del N. 27)

mercader

  1. Quenca, Diego de

Normandía

CFr

hijos

bienes raices, casado con hija de francés

tonelero

  1. Reyes, Juan de los

Fla de Amberes

V

hijos

sastre

  1. Rojes, Pedro

Bretón de Vitré

hijos

yerno del capitán Juan Dinones

 

mercader

  1. Roncere, Antonio

Bretón de Vitré

S

mozo

  1. Sierra, Pedro de

Francés de Vberniga [Auvernia]

CN

hijos

bienes raices, mercader e interprete del S.O.

mercader e interprete

  1. Simenterio, Juan de

Fla de Amberes

CFla

hijos

tiene viñas y heredad

mercader

  1. Tomás, Juan

Fla de Olanda

Cfla

no

bienes raices

tonelero, aguardentero

  1. Tones, Nicolás de

Fla de Olanda

CN

hijos

bienes raices y labor en el campo

zapatero

  1. Verjel, Pedro de

Bretón de Vitré

S

"naturalizado en estos reynos"

mercader

  1. Vicardo, Juan

Francés de Uberniga [Auvernia]

CN

no

repetido después (n. 89)

sastre

 


Tabla 6. Extranjeros registrados en los puertos de la costa Mediterránea (Cartagena, Mazarrón, Marbella, Málaga, Almería, Vera, Adra, Mojácar, Motril, Salobreña, Huescar, Granada, etc.)

 

PUERTO

NOMBRE

NACIÓN*

ESTADO CIVIL**

HIJOS

INFORMACIÓN ADICIONAL FACILITADA

OFICIO(s)

¿CONFIANZA?

Cartagena

1. Francés, Juan

Fran

CN

hijos, nietos

hombre podre de 70 años, reside más de 30

aguardentero

Si

Cartagena

2. Francés, Pedro

Fran

Cfra

reside 4 años en Cartagena, mercader de lencería y botonería

mercader de lincería y butonería

Si

Cartagena

3. Junje, Julián

Fran de Saint-Malo

CN

hijos

reside 20 años, capitán y regidor; "tiene por la mar tres naves en trato. El corregidor dice que conbiene al servicio de V. magd. que por ahora en aquella ciudad porque es oasión de que aya en ella trato y comercio y se tiene mucha satisfación del"

mercader, capitán, regidor

Si

Cartagena

4. Launay, Julián

Fran de Saint-Malo

S

mozo de 24 años, vecino, reside 4 años, trata y contrata con sus padres en Samalo, rico, trae navios por la mar; "el corregidor dice que no conviene al servicio de V. Magd. Que viva allí porque se tiene sospecha de su vivenda en aquella ciudad"

mercader

No

Cartagena

5. Rodríguez, Antonio

Francés

CN

hijos

reside 10 años

buonero

Si

Cartagena

6. Sevulla, Hernando

Francés

V

hijos

fue casado con natural, vecino 20 años, tiene casas, trata en mercadurías, "valdrá su hacienda 3 mill ducados"

tonelero, tratante

Si

Mazarrón

7. Arreja, Hernando de

Inglés

CN

mozo de 24 años; casado 2 años, reside 3; "su padre avrá que se fue a Yglaterra 2 años y no a buelto; pobre"

arriero

Mazarrón

8. Lanoy, Bernal de

Fran de Ubernia [Auvernia]

CN

reside, casado, 20 años; "no tiene bienes"

sastre

Si

Mazarrón

9. Simon, Juan

Gascuña

CN

hijos, nietos

reside, casado, más de 32 años, "es pobre"

Si

Marbella

10. Alegre, Guillermo

Fran de Proenza [Aix-en-Provewnce] junto a Marsella

Ccor

avrá 7 años que se casó en aqeulla ciudad con hija de Felipe Corzo, Natural de Córcega, "pobre de hedad de 30 años"

marinero

Si

Marbella

11. Conbas, Juan de las

Fran de una isla en el arzobispado de Cors [Córcega]

C

llegó hace un año y medio de Granada, donde dice que vivió 22, trajo su mujer consigo, "es pobre",

Si

Marbella

12. Corzo, Felipe

CN

hija

60 años de edad; se casó en aquella ciudad 28 años con hija de vecino; "no tiene bienes raices"

marinero

Si

Málaga

13. Carate, Nicolás

Fla

hostelero

No